Con motivo del Día Mundial del Sida, Cáritas Diocesana de Terrassa pone en valor el trabajo esencial que se realiza en el Centro SARA de Sabadell para acompañar a personas afectadas por el VIH/Sida. Este servicio residencial, que forma parte de la cartera de servicios de la Generalidad de Cataluña, ofrece soporte integral y personalizado para garantizar una mejor calidad de vida, combatir la exclusión social y potenciar la autonomía de sus participantes.

El centro, inaugurado en 1995, es un hogar temporal donde se proporcionan recursos como alojamiento, comida e higiene, al tiempo que se promueve la autoestima, la integración social y el cuidado de la salud. Los equipos de profesionales y voluntarios trabajan coordinadamente con servicios sociales y sanitarios para apoyar emocionalmente, asegurar el seguimiento médico y fomentar hábitos que ayuden a las personas a convivir con la enfermedad. Una enfermedad que actualmente tiene tratamientos que alargan la esperanza de vida de las personas que la padecen, pero que se ven afectadas por un envejecimiento prematuro que les comporta otras repercusiones.

El acompañamiento del Centro SARA trasciende la atención básica, ofreciendo espacios de convivencia y actividades que fomenten la cohesión y la motivación. Desde tertulias de reflexión hasta salidas lúdicas, las personas participantes encuentran una comunidad que las acoge y les ayuda a reanudar sus vidas con dignidad y, llegado el momento, se las acompaña a morir dignamente, en un entorno acogedor y acompañados por seres queridos.

Este 1 de diciembre, Cáritas reafirma su compromiso de transformar la mirada social sobre las personas afectadas por el VIH, rompiendo prejuicios y siguiendo apostando por el acompañamiento como motor de cambio y esperanza.

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