Tarjetas monedero
Tarjetas que permiten acceder a las necesidades básicas desde unos principios de organización colectiva y de apoderamiento a través de la participación de las personas que vienen a pedir ayuda a Cáritas, del apoyo mutuo y de la horizontalidad.
Equivalente al coste de 1 kg de pechuga de pollo
Equivalente al coste de 2 packs de 6 litros de leche
Equivalente al coste de 1 pack de jabones y productos para la higiene personal
Las necesidades básicas
Las necesidades humanas son universales. Son comunes a todos los individuos y lo que varía son las formas con las que se da respuesta. Ayudar a la subsistencia de las personas es importante, pero para el desarrollo del individuo lo son tanto o más la protección, el afecto, el entendimiento, la participación, el ocio, la creatividad, la identidad, la libertad. ..
Hay que repensar respuestas implicando las personas. Hay alternativas que permiten acceder a las mismas necesidades básicas pero desde unos principios de organización colectiva y de apoderamiento a través de la participación de las personas que vienen a pedir ayuda a Cáritas, del apoyo mutuo y de la horizontalidad.
«La necesidad lleva al ingenio», dice el refrán popular. Y, efectivamente, la necesidad sentida como tal, nos motiva, nos moviliza, nos compromete, desarrolla las potencialidades y los recursos propios de la persona. Este enfoque promueve el protagonismo y la participación. Desde este enfoque las personas dejan de ser sólo receptoras de ayuda para pasar a ser protagonistas de su vida.
Nuestras acciones deben desarrollar las capacidades y potencialidades de la persona, así como también ofrecer escucha y acompañamiento personal y familiar. Es aquí donde se encuentra la potencia y el sentido de Cáritas. Debemos buscar siempre que nuestras acciones sean sinérgicas.
Las necesidades básicas
Las necesidades humanas son universales. Son comunes a todos los individuos y lo que varía son las formas con las que se da respuesta. Ayudar a la subsistencia de las personas es importante, pero para el desarrollo del individuo lo son tanto o más la protección, el afecto, el entendimiento, la participación, el ocio, la creatividad, la identidad, la libertad. ..
Hay que repensar respuestas implicando las personas. Hay alternativas que permiten acceder a las mismas necesidades básicas pero desde unos principios de organización colectiva y de apoderamiento a través de la participación de las personas que vienen a pedir ayuda a Cáritas, del apoyo mutuo y de la horizontalidad.
«La necesidad lleva al ingenio», dice el refrán popular. Y, efectivamente, la necesidad sentida como tal, nos motiva, nos moviliza, nos compromete, desarrolla las potencialidades y los recursos propios de la persona. Este enfoque promueve el protagonismo y la participación. Desde este enfoque las personas dejan de ser sólo receptoras de ayuda para pasar a ser protagonistas de su vida.
Nuestras acciones deben desarrollar las capacidades y potencialidades de la persona, así como también ofrecer escucha y acompañamiento personal y familiar. Es aquí donde se encuentra la potencia y el sentido de Cáritas. Debemos buscar siempre que nuestras acciones sean sinérgicas.
Las familias no pueden cubrir sus necesidades por…
Trabajo precario y paro:
- Salarios bajos.
- Paro de larga duración.
- Prestaciones públicas insuficientes.
Baja protección social:
- Recortes en educación, sanidad, servicios sociales.
- Prestaciones públicas en descenso.
Fragilidad humana:
- Sin red relacional (familia, amistades …).
- Enfermedades.
- Roturas familiares …
El actual modelo se basa en las ayudas en especie
Las familias no pueden planificar la compra.
No pueden decidir según sus gustos personales, costumbres culturales, necesidades de salud …
Se favorece la pérdida de la autonomía personal.
Se corre el riesgo de perder hábitos de administración del presupuesto familiar y las rutinas de compra.
Necesitamos innovar
En Cáritas queremos dar la mejor respuesta
Para promover esta innovación, ¿que queremos?
- Dignificar al máximo la atención.
- Impulsar proyectos donde las personas participen.
- Promover el intercambio y la reciprocidad.
- Potenciar proyectos igualitarios, favorecer la discreción y evitar circuitos para pobres.
- Mantener los hábitos y las relaciones familiares (cocinar, comer, celebrar …).
- Elegir lo que se come, según gustos personales, culturales o de salud.
- Promover la autonomía y el empoderamiento de la persona (modelo no asistencialista).
- Evitar el desperdicio y fomentar la sostenibilidad.
- Mantener el comercio local y de proximidad.
- Promover la formación y la inserción laboral.
Si quieres apoyar este proyecto y otros de lucha contra la pobreza, dona ahora
Ayúdanos a estar donde más nos necesitan.