Programa de Formación 2021-2022: Construimos una comunidad que sueña a través del “SER” y el “HACER” de Càritas
Formémonos juntos, descubramos nuevos caminos, construyamos juntos, preguemos y trabajemos por una comunidad llena de vida que acoja todas las realidades y las acompañe a ser más justas, igualitarias y placenteras
Formarte es un estilo de vida. Formarte es una decisión, una declaración de intenciones. Formarte es construir tu camino para allanar el de los demás. Formarte es abrir las puertas a nuevos retos, nuevos conocimientos, nuevas situaciones, nuevas experiencias. Requiere un tiempo invertido y una motivación, que a veces cuesta encontrar porque queremos resultados al momento. Formarte no tiene un ritmo determinado, se adapta al de tu vida. Formarte es un reto que surge de nuestro interior, de nuestras inquietudes y reflexiones, y aceptarlo y perseguirlo demuestra coraje, valentía y esfuerzo.
Este camino no es individual, es una serie de caminos que se entrelazan y comparten un mismo fin. Por tanto, se produce tanto un viaje individual como colectivo. El plan de formación que ofrecemos para el curso 2021-2022 está preparado para ayudar a profundizar en el «SER» y el «HACER» del estilo de Cáritas para llegar a nuestro destino.
El objetivo de la formación suele ser la ACCIÓN, llevar a cabo un propósito o finalidad que nos enriquece el espíritu y nos complementa la vida. Pero para poder llegar a la final hay que estar abiertos a tener dos acompañantes de viaje constantes: la REFLEXIÓN que nos lleva a meditar cómo realizamos nuestros actos y que nos invita a observarnos desde nuevas perspectivas, y la TRANSFORMACIÓN que nos guía hacia a un nuevo estado vital, profundizando en cuestiones que creíamos sabidas y resueltas, y presentando otras nuevas y desconocidas para trabajar.
Por lo tanto, formarte es obtener las herramientas necesarias para crecer, aprender, escuchar, abrirse, reflexionar, cuestionar, aceptar, construir el propio camino con dignidad.
El estilo de Cáritas nos conduce por este camino a través de su Modelo de Acción Social donde la persona es el centro de nuestra intervención, y el el motor de nuestra acción. Por eso es muy importante aprender acompañar y estar abiertos al encuentro con el otro, pero para ello también hay que dejarnos acompañar. La realidad que vivimos es sólo un pedazo de la realidad global, cambiante y en evolución, y por eso hay que dejarse interpelar por las realidades de los otros, abrazarlas, conocerlas, y actuar en consecuencia. La Iglesia es el signo, la señal de este viaje que nos llama a ser comunidad de Vida, ser comunidad Viva, darnos herramientas para ejercer nuestra acción social hacia los más empobrecidos desde nuestro sentido y manera de hacer, junto con la de Càritas, que este año se caracteriza en fomentar ser más pueblo y construir una comunidad que sueña. Los sueños nos ayudan a tener una mirada más profunda, inventiva y resolutiva. Permiten crear, anhelar y proyectar la esperanza de una vida diferente y mejor para todas las personas, que proteja, cuide y vele especialmente para las vidas que han perdido la esperanza y la capacidad de soñar.
En Càritas queremos que formes parte de esta comunidad y que nos ayudes a crear espacios de encuentro para fomentar la reflexión, compartir nuevas experiencias y conocimientos impulsando la motivación propia y de quienes nos rodean, compromiso para transformar y mejorar la realidad social, y vertebrar la espiritualidad que nos caracteriza.
Formémonos juntos, descubramos nuevos caminos, construyamos juntos, preguemos y trabajemos por una comunidad llena de vida que acoja todas las realidades y las acompañe a ser más justas, igualitarias y placenteras.
